jueves, 9 de diciembre de 2010

Carta abierta a Alejandro Sanz. de Hugo Chavez Frías

Tomado de la Jornada Miércoles 8 de diciembre 2010
Presidente Chávez, quiero ir a cantar a su país… ¿Me lo permite?¿Me da su palabra que no le pasara nada ni a mi público, ni a mi gente, ni a la empresa, ni a mí?
Alejandro Sanz

Señor Alejandro: sabe usted lo que significa ser esclavo sin cadena…
Esclavo sin cadenas, es simplemente continuar siendo esclavos sin cargar los grilletes…
¿Porque razón no te has preguntado todavía, del por qué Venezuela es atacada con artillería pesada solamente por las potencias occidentales?

¿O será que formas parte de ellos y te haces el distraído?

Infórmate amigo mío, y pregúntate porque Colombia es considerada una de las naciones donde existe mas desigualdad por culpa de gobiernos que solo mandan para unos pocos y las riquezas son distribuidas para unos privilegiados, mientras Venezuela es reconocida como el primer país en la región en cuando a bajar la pobreza extrema de manera drástica en el gobierno de Chávez Frías.

¿No te llamó nunca la atención que después que nuestro país se volcó a la izquierda, automáticamente se comenzaron a unir la mayoría de los pueblos de América Latina, en una clara señal de lo que querían los pueblos?…

¿Pides permiso para venir a cantar?

¿No te da vergüenza decir eso?

¿En un país democrático donde cualquier persona puede decir lo que se le venga en gana y no como te cuentan?

Te diré algo:

La mayoría de los latinoamericanos que levantaban su voz por intermedio del canto, en señal de protesta por las infinitas injusticias que sufrían sus pueblos por culpa de dictaduras asesinas de derecha…

Nunca pidieron permiso para arriesgar su vida en nombre de los miserables, y en esos tiempos si que arriesgaban el pellejo…

Alguna vez te dignaste escuchar alguna prosa convertida en canción de Don Atahualpa Yupanqui…

¡Si!, aquel que lo llamaban el padre de la canción folclórica latinoamericana…

La dictadura fascista argentina lo persiguió y tuvo que asilarse en Europa, por si no lo sabes el mismo que en París compartió escenario con alguien llamada Edith Piaf…

Nunca te contaron del cantautor Víctor Jara, que la dictadura chilena de Pinochet, le corto las manos para que no volviera jamás a tocar su guitarra acompañado su canto y no conformes con ello, lo acribillaron indefenso en el Estadio de futbol de Santiago…

Seguramente conociste a Mercedes Sosa, “la negra del Sur” como la llamaban todos los pueblos latinoamericanos…

Si no la conociste, te invito que te metas en Youtube y la escuches cantando: “Solo le pido a Dios” y después me cuentas…

A esta cantautora pueblo, cantando en la ciudad de La Plata en el año 79 la dictadura fascista la detuvo a ella y a todos los que osaron ir a verla cantar. También tuvo que exiliarse en Europa en Paris y Madrid, para que no la mataran…

Leíste alguna vez a Mario Benedetti el que nos decía que “El Sur también existe”, al igual que su compatriota Alfredo Zitarrosa aquel del “Violín de Becho”…

Ellos también se vieron obligados a exiliarse en Europa por amenazas de muerte…

A León Gieco, un general le puso una pistola en la cien, diciéndole:”La próxima vez que vengas a cantar a la universidad de Luján y cantes esa canción te voy a pegar un tiro en la cabeza”, refiriéndose a “Hombres de Hierro”…

Guaraní se tuvo que marchar también al igual que la Nacha Guevara, que le colocaron una bomba en un teatro mientras cantaba, los fascistas argentinos…

¡¡Si hasta el tango Cambalache lo prohibieron en las emisoras de radio la dictadura argentina!!…
¡¡Anímate!!...Y escribe una canción, de las miserias del mundo…

Háblanos de los olvidados de Haití, de los miles y miles de muertos en Irak, de los de Afganistán, de la hambruna del África, de la desnutrición en la América pobre, de la desigualdad abismal existente entre ricos y pobres, de las interminables mujeres asesinadas en ciudad Juárez, de los niños obligados a trabajar robándoseles lo único que vale la pena vivir en esta loca vida, “su niñez”…

Infórmate, escribe, no vengas solo a cantar…

Recorre las villas miserias de pueblos que claman por igualdades, las favelas de los sin techo…
Y después me cuentas, si todavía te quedan fuerzas de criticar a Chávez…

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Del la "Castañeda" a los Hospitales psiquiátricos


INTERNA DEL HOSPITAL GENERAL LA CASTAÑEDA


INTERNA DEL CENTRO DE ASISTENCIA E INTEGRACIÓN SOCIAL, VILLA MUJERES EN LA DELEGACIÓN GUSTAVO A. MADERO. FOTO MARCO PELÁEZ (La Jornada)

Hoy el periódico "La Jornada", publico un artículo sobre las declaraciones de las ONGS sobre el abandono a las personas con enfermedades mentales y discapacidades fisicas y el trato inhumano que reciben.
"Al no recibir cuidados, detalló el informe, las personas se aislan, son despojadas de su capacidad jurídica con argumentos paternalistas y terminan sufriendo un deterioro aún mayor de sus condiciones de vida. Inclusive, muchos de ellos simplemente desaparecen, y se especula que son víctimas de abusos sexuales o vendidos a grupos de traficantes de seres humanos.

Además de estar sujetos a torturas y malos tratos, sostiene el documento, hay enfermos que han sido sometidos a intervenciones sicoquirúrgicas, como lobotomías, a pesar de que la Organización Mundial de la Salud señala que dicha práctica nunca debe realizarse en personas que no puedan dar su consentimiento informado."

Esto me hizo recordar el Hospital General "La Castañeda" inaugurado en 1910 por Porfirio Díaz en el marco de las conmemoraciones del centenario de la independencía de México, en ese lugar se reunieron a los enfermos y enfermas de los hospitales coloniales del "Divino Salvador" y "La Canoa". La Castañeda sufrió de asinación, maltrato a los pacientes, falta de material quirúrgico, negligencías médicas, violaciones a las pacientes, olvido de los familiares.
Claro ejemplo de eso es lo que sucedió al tratar de rehabilitar del shock insulínico a doce enfermas que fueron inducidas se cambio el azúcar por raticida y fallecieron.
También hubo fotos, los rostros de los enfermos mentales rapados, mal vestidos y sucios, se denuncio el abandono y fue el aula de innumerables psiquiatras.
En 1968, se decide cerrar "La Castañeda" y se llevan piedra por piedra la fachada para ser reconstruida en una hacienda de Amecameca. Parte de la leyenda negra se extendió a estas nuevas granjas y hospitales psiquiátricos que cien años después siguen actuando bajo las mismas formas que denigran, abusan y perjudícan a las personas que deberían de ayudar.Es inconcebible que en México perduren estas formas de maltrato y siempre a personas que vienen de una baja extracción social, cultural y económica.